COMO COCINAR CORRECTAMENTE LOS PURÉS DE LOS BEBÉS.

02.01.2015 14:47


PURÉS DE VERDURA.
A partir de los dos años tienen que comer de todo, como lo hacen las personas mayores siempre que sigan un régimen alimenticio correcto y equilibrado, como nuestra primitiva dieta mediterránea, con toda clase de verduras, frutas, legumbres, cereales, carnes, pescados,

 

 

huevos…

Para ello tenéis mi libro “Menús para estar sanos y no engordar” que apareció en noviembre de 2002 y va ya por su quinta edición. En su prólogo os explica menús completos y que servía para todos los que quisieran alimentarse de una manera saludable, para niños a partir de los dos años, y para todos aquellos que debieran consumir un número determinado de calorías, para diabéticos, personas a régimen o que cuidan su salud no queriendo coger peso, gente delicada… 

 

Pero hoy vamos a centrarnos en los purés de verduras que los bebés empiezan a ingerir normalmente a partir de los seis meses. Será vuestro pediatra el que os indicará las clases de verduras que debéis introducir al principio, aunque es verdad que cada profesional puede recomendaros verduras diferentes. Pero, casi lo que menos cuenta es la clase de verduras que le vayáis a poner ya que, lo más importante, es el estado en que adquirís estas hortalizas y cómo las manipuláis hasta transformarlas en puré y dárselas a vuestros hijos.

 

Aunque podría rellenaros páginas y páginas con bibliografía científica al respecto, me voy a limitar a transcribiros lo que dicen, en su Manual Teórico-Práctico de Alimentación y Nutrición, las editoras y doctoras Clotilde Vázquez del departamento de Nutrición del Hospital Severo Ochoa de Madrid, Consuelo López-Nomdedeu, especialista en Educación Nutricional y Ana Isabel De Cos del departamento de Nutrición del Hospital La Paz de Madrid.

“Se sabe que las vitaminas se pierden menos con temperaturas elevadas durante poco tiempo que temperaturas más bajas durante un tiempo más largo. La cocción a presión es pues el mejor método de cocción cuando se realiza correctamente, pero puede ser el peor si se prolonga más de lo necesario”.

 

Ya lo sabéis... Para elaborar los purés de vuestros bebés el método mejor a seguir ya que es el que conserva el mayor número de vitaminas y minerales es el de las ollas superrápidas, y cuanto mayor  calidad tengan, tanto mejor.

 

Muchos entonces me diréis que os comprasteis el Thermomix pensando en los purés de vuestros bebés, y para elaborar los de frutas y triturar los de verduras no hay máquina igual en el mercado.

En el Thermomix no vais a sobrepasar los 100º de temperatura si cocéis vuestros purés a la temperatura máxima que permite la máquina, que es la de Varoma, pero vais a tardar por lo menos 20 minutos, y, además de perder valor nutritivo con esta cocción tan larga, algunas verduras como las acelgas, espinacas, judías verdes, puerros… conservan un sabor demasiado fuerte que algunos bebés rechazan.

 

De acuerdo con lo que nos dicen nuestros grandes médicos especialistas en nutrición, el mejor método desde el punto de vista dietético o nutricional para cocer estos alimentos, es una buena olla superrápida.

En ellas volcaréis exclusivamente la cantidad de agua que necesitáis para triturar al final las verduras, aprovechándola siempre toda sin tirar ninguna, ya que en esta agua van disueltas las sales minerales solubles en agua, como el calcio, el potasio…, y todas las vitaminas también solubles como las del grupo B… y la que queda de vitamina C después de la cocción

Aunque antiguamente se recomendada añadir sal a estos purés infantiles, esta práctica está hoy totalmente proscrita y desaconsejada puesto que los alimentos ya llevan en sí la suficiente.

 

Cuando volquéis en la olla las hortalizas que no os mande el puericultor, patata, zanahoria, acelga, cebolla, calabacín, nabo, calabaza naranja, y quizás cebolla, tomate, algo de ajo, puerro, judías verdes, espinacas… lavadlas muy bien previamente, en varias aguas si hiciera falta, pero sin dejarlas nunca en remojo, porque también perderíais nutrientes innecesariamente. Muchas de ellas, además, como la zanahoria, el nabo, el calabacín… no necesitan pelarse. En estas pieles exteriores, además de concentrarse algunas vitaminas, hay una mayor cantidad de fibra natural tan importante para la salud.

 

Cocedlas exclusivamente 6 minutos con las dos rayitas de la válvula o regulador de presión fuera, sin que sobresalgan ni se escondan. Apagad a continuación el fuego y dejad que esta válvula baje despacio por su propio peso, sin poner nunca la olla a enfriar debajo del grifo.

Cuando la olla se pueda abrir, volcad todo su contenido en el vaso del Thermomix y trituradlo pasando despacio y con cuidado desde la velocidad 1 hasta la máxima si se trata del Thermomix 21, hasta conseguir un puré de textura finísima, inigualable. En el Thermomix 31 no hace falta tomar esta precaución ya que las diferentes velocidades entran, forzosamente, despacio.

 

Si no tenéis Thermomix, trituradlo con el tercer brazo o con la trituradora que tengáis hasta conseguir una crema fina, que nunca llegará a ser tan suave como la obtenida con el aparato.

 

Si el médico quiere que ya pongáis a estos purés algún tipo de grasa, añadirle ahora en crudo la cantidad de aceite de oliva virgen extra que os indique, normalmente 1 cucharada sopera, es decir 10 g. No hagáis nunca sofritos previos, nada recomendables.  

 

Procurad que este puré no permanezca caliente durante horas y horas, porque hoy se ha visto que durante los calentamientos prolongados también se pierden propiedades. Elaboradlo a última hora, para dárselo al bebé en cuanto se enfríe un poco.

 

Si este puré se va a guardar, porque se ha hecho para varios días, consultad la siguiente receta “Purés de los bebés, cómo conservarlos y congelarlos correctamente”

Los que queráis explicaciones más detalladas sobre este tipo de ollas podéis consultar los libros “Recetas fáciles para todos los días”, “Recetas fáciles para un día especial”, “Platos sanos de diario para cocinar en 10 minutos”, “Platos sanos de diario para cocinar en 20 minutos”, y “Platos sanos de diario para cocinar en 30 minutos”. Las recetas del libro “Menús para estar sanos y no engordar” también están elaboradas en este tipo de ollas. 

 

Cuando incorporéis a estos purés de verduras carne, pollo o pescado, no los añadáis nunca al mismo tiempo que las verduras porque sus tiempos de cocción son muchísimo más cortos, y si los cocéis en exceso también pierden valor nutritivo.

Donde mejor se cocinan estos alimentos, carnes, aves, pescados… es en el microondas, sin añadir nada de nada. El único requisito fundamental es que tapéis el recipiente muy bien para que no haya ninguna evaporación y los alimentos se cuezan con su propia agua interior.

40 o 50 g de pollo, carne o pescado… se cocinaran, si están cortados en trozos pequeños, en 2 o 3 minutos nada más. Recordad que las tapaderas de agujeros especiales para microondas sirven para calentar con calidad ciertos platos, no todos, y nunca para cocinar. 

La carne se cocerá, aunque este tiempo sea pequeño, pero no hay por qué cocerla más pues aunque esté algo dura, como se va a triturar no importará.

Lo que sí es importantísimo es retirar todas las partes grasas que pueden llevar, tanto la carne como las aves, aunque se trate de pechugas sin piel. Éstas pueden conservar cúmulos blanquecinos de   grasa animal saturada, nada beneficiosa para el organismo humano, y mucho menos para el bebé del que hay que cuidar su alimentación con verdadero esmero desde que nace.

 

PURÉS DE FRUTAS.

Los purés de frutas si pueden hacerse directamente en el Thermomix pero conservando previamente la piel de las frutas, siempre que sea posible ya que en ellas está la mayor cantidad de fibra.

 

Lavad las frutas muy bien debajo del grifo, frotándolas incluso con un cepillito y troceadlas. Así podéis triturar las manzanas de cualquier variedad y las peras si son de la variedad blanquilla, retirándoles antes el corazón y las pepitas, los albaricoques, los melocotones y nectarinas, las ciruelas… 

 

Como el plátano es muy rebelde y muchas veces quedan trocitos que no desaparecen, antes de añadir las frutas que nos proporcionan mucho jugo, como la naranja, machacad un poco estas frutas más duras pulsando dos o tres veces el botón turbo.

Bajad con la espátula de goma blanda todos los trocitos que se han desparramado por las paredes del vaso y triturad a continuación el conjunto en velocidad máxima.

Añadid las frutas más jugosas como la naranja bien pelada y sin nada de piel blanca que amargaría, o la mandarina, o las fresas si ya se las podéis introducir y volved a triturar en velocidad máxima.

No calentéis nunca estas frutas, ni siquiera levemente, ya que casi todas ellas son ricas en vitamina C y ésta es especialmente sensible al calor, al aire y a la luz.

 

Inmediatamente después de elaborados dádselos al bebé. De lo contrario congeladlos al máximo de frío, 24º bajo cero por lo menos, y nunca a una temperatura superior.  

https://undulcetesoro.blogspot.com.es/2014/12/como-cocinar-correctamente-los-pures-de.html